Modo de línea interactiva, de doble conversión o de conversión inteligente: seleccione el que mejor se adapte a sus necesidades
Como responsable de un centro de datos o de instalaciones de aplicaciones críticas, se enfrenta a innumerables retos, en especial en lo que se refiere al rendimiento de los SAI (sistema de alimentación ininterrumpida) y a la gestión de la eficiencia energética. Entre sus responsabilidades se encuentra la durabilidad de los equipos, pero también el suministro ininterrumpido de cargas críticas.
El modo de funcionamiento típico para el SAI es el modo de bypass. No obstante, en función de los rendimientos esperados, también hay disponibles otros dos modos: el modo de doble conversión y el modo de línea interactiva. Aunque los SAI también pueden conmutarse al modo «Eco», hasta ahora pasar de un modo a otro solo era posible después de una breve pérdida de potencia. Esto significaba que era necesario seleccionar los mejores ajustes para optimizar el rendimiento del SAI y mejorar la eficacia de la utilización de la energía (PUE) de las instalaciones.
Ahora, Socomec puede ayudarle a enfrentarse a este reto con su última novedad: el modo de conversión inteligente. Esta función revoluciona la forma en que se utilizan los SAI. Combina una elevada eficiencia y una protección sin igual, yendo mucho más allá de los límites del modo «Eco» tradicional en el mercado.
El modo de conversión inteligente es una novedad que mejora la eficiencia del SAI no solo reduciendo de forma singnificativa las pérdidas de energía, sino también garantizando la protección del suministro energético. Al contrario de lo que ocurre con los modos «Eco» estándar, que normalmente están sujetos a caídas de tensión, el modo de conversión inteligente garantiza una transición inmediata en caso de perturbaciones en la red eléctrica, sin poner en riesgo la protección de la carga. De este modo no solo se reduce el consumo de potencia, sino también las emisiones de CO2, a la vez que se optimiza el rendimiento energético de las infraestructuras. En función de la calidad de su red, el SAI realiza una gestión inteligente y selecciona el mejor modo de funcionamiento para optimizar su rendimiento. Gracias a esta novedad en materia de gestión de potencia para infraestructuras críticas, el modo de conversión inteligente de Socomec ayuda a los clientes a cumplir sus objetivos de equilibrio energético sin poner en riesgo la calidad o la sostenibilidad de la potencia.
¿Cómo funciona el modo de conversión inteligente?
El modo de conversión inteligente utiliza un algoritmo avanzado que supervisa la red de forma continua en tiempo real. Selecciona dinámicamente el modo más adecuado para suministrar la carga y garantizar la máxima eficiencia del SAI, mientras se prioriza la calidad de la potencia para las cargas críticas.
Por ello, al contrario de lo que ocurre con el modo «Eco» estándar, que puede provocar caídas de tensión por un SAI inactivo y contactores de salida abiertos, el modo de conversión estándar garantiza una transferencia ininterrumpida de la carga. Está diseñado para ofrecer protección continua utilizando el bypass estático como principal fuente de energía, a la vez que el SAI se mantiene activo y sincronizado con la red eléctrica. En caso de perturbaciones en la red, el SAI puede cambiar inmediatamente al modo de doble conversión con un tiempo de transferencia de 0 milisegundos. Con certificación por parte de laboratorios externos, esta transferencia cumple los requisitos de la norma IEC 62040-3, clase 1: la máxima categoría de protección que define las exigencias de protección más elevadas para sistemas de alimentación crítica.
Y lo que es más, el SAI funciona como filtro activo gracias a su arquitectura totalmente bidireccional. Puede cargar baterías y compensar armónicos o reactivar la potencia de carga simultáneamente. El modo de conversión inteligente garantiza un consumo de potencia limpio en la entrada del SAI.
Comparativa: doble conversión FRENTE A conversión inteligente
Utilizando la línea de bypass estático como principal fuente de energía, el modo de conversión inteligente alcanza los máximos niveles de eficiencia disponibles en el mercado. Al contrario de lo que ocurre en la doble conversión, cuya eficiencia puede disminuir cuando los niveles de carga sean elevados, el bypass estático mejora su eficiencia cuando la velocidad de la carga es elevada, aumentando la salida de forma considerable. Cuando la velocidad de la carga es elevada en el modo de conversión inteligente, la medición de la PUE del centro de datos mejora significativamente.
Con una eficiencia de casi el 99 % desde un nivel de carga del 50 %, el modo de conversión inteligente conlleva un ahorro energético considerable, de hasta 350 MWh al año, reduciendo al mismo tiempo la generación de calor, los costes de refrigeración y las emisiones de CO2. Esto implica una reducción directa de los costes operativos (OPEX) y una mejora en la sostenibilidad de la planta.
Imagen: Comparación entre la cantidad de energía ahorrada por el modo de doble conversión y de conversión inteligente, tomando en consideración la tasa de carga del SAI.
Supervisión continua: proteja el suministro energético y evite conmutaciones repetitivas
El modo de conversión inteligente incluye un sistema de supervisión dedicado diseñado por expertos de Socomec que comprueba varias características de la red (tensión, frecuencia y distorsión armónica) para garantizar unas condiciones óptimas para el suministro de la carga.
Un algoritmo interno comprueba de forma continua la calidad de la red para garantizar que sus características se mantengan dentro de los límites predefinidos. En caso de perturbaciones, el algoritmo de muestreo de alta frecuencia detecta cualquier tipo de perturbación en la red en 0 milisegundos, lo que le permite conmutar de manera instantánea al modo de doble conversión.
para los casos en los que la red presenta inestabilidad, Socomec ha desarrollado un algoritmo inteligente para evitar las transferencias repetitivas entre el modo de doble conversión y el modo de conversión inteligente. Este algoritmo define un tiempo mínimo obligatorio de estabilidad de la red antes de pasar a la línea de bypass estático, en función del número de transiciones ya realizadas. Esta función garantiza la estabilidad y evita que las conmutaciones entre los dos modos se realicen con demasiada frecuencia. Si la red sigue presentando inestabilidad, el SAI informará al cliente in desactivará temporalmente la funcionalidad activada por su algoritmo de muestreo.
Dicho de otra forma, la carga siempre está protegida por medio de un suministro energético ininterrumpido y de gran calidad. El modo de conversión inteligente decide de forma autónoma cómo suministrar la carga crítica sin interrupciones, en función de la calidad de la red.
Además, el SAI de Socomec es capaz de proteger la línea de bypass frente a sobretensiones utilizando protectores de sobretensión, si este tipo de equipo aún no se ha incorporado a las instalaciones del cliente.
Ventajas del modo de conversión inteligente
Eficiencia energética
Reduciendo las pérdidas de energía típicas de los SAI hasta 5 veces más en comparación con un modo de doble conversión estándar, el modo de conversión inteligente permite que los usuarios reduzcan considerablemente su consumo energético y obtengan una eficiencia del 99 %. Esto también implica que se genera menos calor y se reducen los requisitos de refrigeración y los costes operativos. Estas mejoras en la eficiencia tienen un impacto directo sobre el coste total de la propiedad (TCO), logrando así un ahorro significativo año tras año.
MÁS SOSTENIBILIDAD
El modo de conversión inteligente ofrece también importantes beneficios medioambientales. Reducir el consumo energético del SAI tiene un impacto directo en la reducción de sus emisiones de CO2. Se trata de una optimización que no debe pasarse por alto si desea evolucionar hacia unas prácticas más sostenibles.
CALIDAD VERIFICADA Y GARANTIZADA DE LA POTENCIA
En caso de que se produzcan perturbaciones graves en la red eléctrica, el modo de conversión inteligente de Socomec garantiza una transición instantánea (0 milisegundos) al modo de doble conversión, ofreciendo así protección de alta calidad y un suministro eléctrico continuado para cargas críticas. Esto solo es posible gracias al avanzado sistema de supervisión de redes en tiempo real de Socomec, su hardware específico y su rápido algoritmo de muestreo. Esta gestión inteligente permite controlar de forma continua la calidad del suministro de potencia, lo que garantiza una capacidad de respuesta inmediata. El SAI cumple la estricta norma IEC 62040-3, clase 1.
Por ello, los SAI actúan como filtro y corrigen los factores de tensión y los armónicos de la carga crítica cuando han activado la función de conversión inteligente. Eliminan la mayor parte de la distorsión armónica (en especial la de los niveles 3, 5 y 7). Dicho de otro modo, los equipos sensibles se benefician de un suministro energético continuo, en la entrada del SAI, se protegen frente a sobrecargas, subtensión y sobretensión, mientras se optimiza la eficiencia energética cuando la red presenta una calidad aceptable.
Aplicaciones y limitaciones
Centros de datos y cargas críticas
El modo de conversión inteligente es perfecto para infraestructuras modernas, centros de datos y otras aplicaciones críticas que requieren una eficiencia elevada y una calidad fiable de la potencia. No solo proporciona protección continua, sino que también garantiza un rendimiento óptimo, incluso en caso de perturbaciones de la red.
FUNCIONAMIENTO CON UN GENERADOR ELÉCTRICO
El modo de conversión inteligente no se recomienda para funcionamiento con un generador eléctrico, ya que este tipo de situación temporal requiere un funcionamiento de doble conversión. En esta situación, conmutar el SAI al modo de doble conversión permite realizar una transición fluida entre el funcionamiento con batería y el encendido del generador gracias a una rampa lineal en el rectificador.
El modo de conversión inteligente de Socomec revoluciona el funcionamiento de los SAI y la gestión de los centros de datos y las aplicaciones de misión crítica. Combinando su inigualable eficiencia energética, su supervisión continua y su protección instantánea, permite a las empresas y a los administradores de las instalaciones cumplir los requisitos energéticos, a la ver que minimizan su impacto medioambiental.